Punto Crítico

Las familias de las viviendas de la calle Ferrobús, afectadas por las obras de la segunda fase del soterramiento de las vías del tren a su paso por la capital almeriense, se encuentra en una situación de extrema vulnerabilidad y exclusión social. Han sido privadas del suministro eléctrico, una medida que consideran una forma de presión para que abandonen sus hogares. Cabe destacar que estas familias son contribuyentes responsables que pagan sus alquileres, impuestos y recibos de luz.

A primera hora del jueves, operarios procedieron al corte del cableado, dejando sin electricidad a toda la calle Ferrobús. En esta calle, aún residen una decena de familias que están luchando en los juzgados contra ADIF por la expropiación forzosa de sus viviendas.

Estas familias se encuentran en una situación desesperada, sin tener dónde ir y enfrentándose a unos alquileres prohibitivos. Son familias trabajadoras que, además de cumplir con sus obligaciones fiscales, tienen a su cargo personas mayores y niños pequeños. Se sienten presionadas e indignadas ante la falta de aviso y la interrupción abrupta del suministro eléctrico, calificando su situación de inhumana.

Han exigido a Endesa la pronta restauración del suministro eléctrico y están considerando tomar medidas legales si la situación persiste. A pesar de la falta de soluciones por parte de las administraciones a las que se han dirigido y de la vía judicial emprendida, estas familias están decididas a seguir residiendo en sus hogares y a defender sus derechos ante esta injusta situación social.