Punto Crítico

El parking que Almería XXI ha construido en la calle Arráez sigue siendo motivo de controversia.

Son muchos los vecinos que han renunciado a sus plazas y aún más los que continúan luchando contra lo que ellos consideran «un engaño y una estafa».

Uno de los primeros problemas que encontraron los vecinos que decidieron comprar las plazas que ofrecía Almería XXI en dicho parking fueron las rampas de entrada y de acceso a los niveles superiores. La inclinación de estas rampas provocaba daños en los bajos de los vehículos. Este problema fue subsanado días después.

Lo que inmediatamente destaca e impacta es el acabado utilizado. Según diversos trabajadores de la construcción consultados por este medio, aunque el ladrillo utilizado cumple con las especificaciones técnicas, es cierto que está diseñado para ser recubierto y no para quedar a la vista. Algo que posiblemente también pensaron los obreros que realizaron la obra debido a los descuidos en los acabados y la aplicación del cemento.

Otro de los problemas denunciados por los vecinos afectados es el de las goteras. Con las últimas lluvias, se produjeron diversas filtraciones debido a defectos de obra en las ventanas. «Hemos pagado una media de 25.000 euros por un aparcamiento lleno de goteras», denuncian en Facebook.

Si esto no fuera suficiente, también denuncian la aparición de nuevas plazas que no estaban inicialmente en el proyecto, lo que consideran una nueva estafa por parte del Ayuntamiento de Almería. No descartan acudir a los tribunales si el equipo de gobierno no les ofrece una solución satisfactoria.

RESPUESTA DEL AYUNTAMIENTO

El gobierno municipal dirigido por el Partido Popular ha decidido impulsar una intermediación entre la empresa municipal Almería XXI y los vecinos afectados. La situación venía siendo insostenible desde que la alcaldesa de Almería, María del Mar Vázquez, se negó a responder en una audiencia ciudadana en algunos plenos.

LA OPOSICIÓN

Tanto el PSOE, VOX como Podemos-IU han manifestado sus recelos ante el parking, al que han tildado de «chapuza». Incluso tanto el PSOE como Podemos-IU lo utilizaron como ejemplo en el último pleno para criticar a la empresa municipal de vivienda.

Actualmente, no hay soluciones a la vista y la paciencia de todos está llegando al límite.