En medio de crecientes tensiones internacionales y alertas de las autoridades europeas sobre el riesgo de una tercera guerra mundial, la Comandancia Naval de Almería ha anunciado el inicio del primer «Ciclo de Cine Naval Joven», acompañado de una exposición fotográfica en el Paseo de Almería sobre la labor de la Armada española.
Hasta el 16 de mayo, el Paseo de Almería se verá inundado de imágenes de portaaviones, unidades de infantería marina, submarinos y fragatas, provenientes del archivo de la Jefatura del Estado Mayor de La Armada y de la Revista General de la Marina.
Adicionalmente, el Teatro Apolo acogerá el «Ciclo de Cine Naval Joven» del 21 al 24 de abril, con la proyección de cuatro películas que serán posteriormente comentadas por profesionales del estamento militar.
Mientras se busca «acercar a la sociedad civil la labor de la Armada española», las actividades programadas levantan críticas y preocupaciones. En un contexto internacional tan delicado, con Europa haciendo apología de un conflicto de gran escala, ¿es ético y adecuado promover un evento que glorifica las capacidades militares?
Estas iniciativas no solo parecen descontextualizadas sino que también pueden ser interpretadas como una forma de propaganda militar, aprovechando un momento de inquietud y preocupación generalizada por la seguridad internacional. La elección de un espacio público como el Paseo de Almería para este tipo de actividades levanta preguntas sobre la sensibilidad y responsabilidad de las autoridades públicas al promover eventos que podrían ser percibidos como una provocación o un intento de normalizar la presencia militar en la vida cotidiana.
El Partido Popular de Almería se une así al Partido Socialista en su propaganda belicista.
Punto Crítico 
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