Las certificaciones sociales en los campos de Almería, como GLOBAL GAP, DEMETER, y BIOSUISSE, lejos de proteger los derechos laborales, se han convertido en herramientas para encubrir la brutal explotación laboral que sufren millas de trabajadores. Así lo denuncia el sindicato SOC/SAT Almería, respaldado por innumerables testimonios, documentos, sentencias judiciales y actas de inspección que sacan a la luz la inmundicia que estas certificaciones intentan ocultar.
Es evidente que estas etiquetas son un vergonzoso ejercicio de «greenwashing» al servicio de los explotadores y las grandes cadenas de supermercados. Mientras millones de consumidores en Europa creen comprar productos bajo condiciones laborales justas, son víctimas de un engaño masivo perpetrado por estas empresas y sus cómplices en las certificaciones. No hay sello que tape la miseria laboral en los campos de Almería, como han demostrado repetidas investigaciones y conflictos laborales en empresas «BIO» que presumen de estar hiper-certificadas.
A esto se suma la complicidad de entidades como APPELLANDO, un nuevo invento encabezado por exdirectivos de Global GAP y secundario por COEXPHAL y otros lobbys patronales, que pretenden dar una imagen de responsabilidad social mientras continúan ignorando las denuncias de los trabajador@s. El SOC/SAT Almería lo ha dejado claro: tras meses de presentar pruebas y solicitar mediación para los trabajadores del grupo BIOSABOR, el resultado ha sido nulo. APPELLANDO no ha hecho nada para resolver las injusticias, mientras promociona al mismo grupo que explota a sus empleados.
¡Basta ya de jugar con los derechos de los trabajadores hortofrutícolas de Almería! El sistema de blanqueo de la explotación laboral está en crisis y el SAT exige respeto y justicia para quienes sufren en este mar de plástico plagado de injusticias. Menos certificaciones fraudulentas, y más acción real para proteger a los verdaderos protagonistas de este sector: los trabajadores.

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