La asociación cultural Amigos de la Alcazaba ha lanzado un duro comunicado en el que cuestiona abiertamente la «alegría» del Ayuntamiento de Almería tras la reciente sentencia del Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA) en relación con el conocido monumento a los Mártires de la Libertad, popularmente conocido como el Pingurucho de los Coloraos.
El origen de la polémica se remonta al proyecto municipal de 2018, cuando el Ayuntamiento planteó una remodelación integral de la Plaza Vieja que incluía la eliminación de su anillo arbolado y la retirada del monumento, con el objetivo de crear una plaza “diáfana”, pensada para terrazas de hostelería. Esta propuesta generó un rechazo frontal de asociaciones culturales, vecinales y ecologistas, que dieron lugar a una intensa movilización ciudadana.
La sentencia más reciente del TSJA desestima un recurso contencioso-administrativo interpuesto por Amigos de la Alcazaba y la Asociación Bicentenario, en el que se exigía que el Pingurucho fuera expresamente protegido dentro del Plan General de Ordenación Urbana (PGOU). Aunque la sentencia reconoce la potestad del Ayuntamiento para decidir qué elementos incluir o no en dicho catálogo de protección, Amigos de la Alcazaba subraya que esta resolución no altera la situación actual: el monumento está hoy protegido como Lugar de Memoria Histórica, los árboles centenarios siguen en pie, y la Plaza Vieja ha sido remodelada respetando su carácter histórico, como Bien de Interés Cultural (BIC).
Una “victoria” que no cambia nada
“¿De qué se alegra el Ayuntamiento?”, se pregunta irónicamente la asociación en su comunicado, recordando que fue la presión ciudadana —y no la voluntad municipal— la que consiguió frenar el proyecto de plaza diáfana. Según relatan, durante años se recogieron más de 23.000 firmas, se organizaron movilizaciones, mesas redondas y se promovieron acciones legales que desembocaron en dos sentencias históricas, en 2022 y 2023, contrarias al Ayuntamiento.
El colectivo lamenta que el Ayuntamiento convierta una sentencia sin efectos prácticos en una supuesta victoria frente a las asociaciones patrimonialistas. «Es una alegría impostada y sin fundamento, porque todos los planes municipales han fracasado, y hoy la Plaza Vieja luce con árboles y con el monumento en su sitio, gracias al trabajo ciudadano, no institucional», señala el comunicado.
Nuevo PGOU en camino: ¿habrá reparación?
Amigos de la Alcazaba también pone el foco en el futuro. El Ayuntamiento ha anunciado la redacción de un nuevo PGOU, que sustituiría al de 1998, y las asociaciones esperan que, tras casi tres décadas de omisión, se incluya al Pingurucho en el catálogo de bienes protegidos. «Cada 24 de agosto se rinde homenaje a los Mártires de la Libertad, y pronto sus restos serán trasladados a este lugar emblemático. ¿Seguirá el Ayuntamiento negándoles el reconocimiento patrimonial que merecen?», se preguntan.
La asociación concluye reclamando “rigor y transparencia” al Consistorio, al que anima a reconocer no solo el valor histórico y simbólico del monumento, sino también el trabajo incansable de la sociedad civil en la protección del patrimonio cultural de Almería. “Si no lo hacen, demostrarán cuál es su verdadero compromiso con el patrimonio”, advierten.
Punto Crítico 
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